Publicación Veintinueve

por Benedetto Cruz
La rata maldita, no esa, la otra, la de albañal, la que deseo esté panza arriba en los miasmas de una cloaca. La rata maldita, no esa, la otra, la que me angustia hasta el dolor físico, la que antes se movía, como una rata, en el borde de las cosas, aún de mí, y me hacía mover, y de qué manera, en todos los sentidos, con todos los sentidos. Bueno, fueron épocas, exactamente fueron, ahora no.
Ahora todo es umbroso, contraído en la boca de mi vientre y mi garganta.
La rata se fue, no esa, la otra.
Morite rata.
No vos, la otra.
Vos no me vas a hacer daño.
Quedate. Afuera llueve.
Ahora todo es umbroso, contraído en la boca de mi vientre y mi garganta.
La rata se fue, no esa, la otra.
Morite rata.
No vos, la otra.
Vos no me vas a hacer daño.
Quedate. Afuera llueve.